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Identificando Bloqueos y Reescribiendo nuestra historia.

Como ya hablamos en anteriores semanas, reconocimos las creencias limitantes y exploramos sus orígenes. Ahora, profundizamos en cómo estos pensamientos bloquean mi crecimiento y transformamos esas barreras en oportunidades, estableciendo afirmaciones que me empoderen para cambiar mi relación con el dinero y la abundancia. En la siguiente lista, encontrarás las creencias muy comunes y cómo cada una puede inspirar un cambio positivo:

“El dinero es la raíz de todos los males”

Bloqueo: Esta creencia me impide ver el dinero como una herramienta neutral y poderosa, generando culpa e inseguridad al buscar la abundancia.
Afirmación: “El dinero es una herramienta poderosa que me permite crear valor y contribuir positivamente en mi entorno.”

“Si nací pobre, moriré pobre”

Bloqueo: Siento que mi origen determina mi futuro, limitando mi ambición y reforzando una sensación de resignación que me impide romper el ciclo de la escasez.
Afirmación: “Mi origen no define mi destino; tengo la capacidad y los recursos para transformar mi vida y alcanzar la prosperidad.”

“Para ganar dinero hay que trabajar duro”

Bloqueo: Esta idea me ata a métodos tradicionales y agotadores, impidiéndome explorar alternativas creativas e inteligentes que optimicen mi tiempo y esfuerzo.
Afirmación: “Trabajo de manera inteligente y creativa, generando abundancia a través del valor que aporto.”

“Los ricos son corruptos o hicieron trampa para tener dinero”

Bloqueo: Al ver la riqueza como algo manchado de corrupción, me resulta difícil aceptar y celebrar el éxito financiero en mi vida sin sentir conflicto interno.
Afirmación: “La riqueza puede ser alcanzada con ética y honestidad; yo merezco prosperar con integridad.”

“El dinero no compra la felicidad”

Bloqueo: Aunque el dinero no es garantía de felicidad, esta creencia refuerza la idea de que buscar abundancia es superficial, impidiéndome valorar los beneficios que una seguridad económica puede aportar a mi bienestar.
Afirmación: “El dinero me brinda la libertad y las herramientas para construir una vida plena y equilibrada.”

“Si me hago rico, mi familia y amigos me verán diferente”

Bloqueo: El temor a que el éxito financiero altere mis relaciones me frena a la hora de aprovechar oportunidades de crecimiento, manteniéndome en la zona de confort.
Afirmación: “El éxito me permite crecer y compartir experiencias enriquecedoras con mis seres queridos, fortaleciendo nuestras relaciones.”

“Más dinero, más problemas”

Bloqueo: Cada avance económico se percibe como el inicio de complicaciones, lo que genera ansiedad y me lleva a sabotear mi propio crecimiento.
Afirmación: “A medida que mi riqueza crece, también lo hace mi capacidad para gestionarla y disfrutar de sus beneficios de manera responsable.”

“Si gano más dinero, tendré que pagar más impuestos y me quitarán todo”

Bloqueo: El miedo a las consecuencias fiscales limita mi visión y me impide buscar estrategias para optimizar mi situación financiera sin temor.
Afirmación: “Con planificación y conocimiento, puedo optimizar mis recursos y contribuir de forma justa sin que ello limite mi prosperidad.”

“No puedo cobrar mucho por mi trabajo, nadie pagará tanto”

Bloqueo: La duda sobre mi valor profesional me lleva a aceptar remuneraciones inferiores, afectando mi confianza y la justa valoración de mi esfuerzo.
Afirmación: “Mi trabajo y mi talento tienen un valor real. Cobro justamente por el valor que aporto y merezco ser reconocido.”

“Invertir es solo para los que ya tienen dinero”

Bloqueo: Creer que las inversiones están reservadas para un grupo privilegiado me excluye de oportunidades de crecimiento económico y de aprender nuevas estrategias para alcanzar la libertad financiera.
Afirmación: “Las inversiones son una herramienta accesible para mí; estoy abierto(a) a aprender y a dar pequeños pasos que me acerquen a mi libertad financiera.”

“Ganar dinero rápido es sospechoso o peligroso”

Bloqueo: El temor a lo desconocido me impide explorar oportunidades ágiles y legítimas que podrían acelerar mi crecimiento, manteniéndome en esquemas tradicionales.
Afirmación: “Estoy abierto(a) a oportunidades legítimas y bien fundamentadas que me permitan acelerar mi crecimiento sin comprometer mi integridad.”

Este ejercicio integral me permite reconocer los bloqueos que han condicionado mi relación con el dinero y, al mismo tiempo, establecer afirmaciones que me impulsen hacia una mentalidad de abundancia. Cada día, al repetir estas afirmaciones, refuerzo mi compromiso de transformar mi realidad y abrirme a nuevas posibilidades que reflejen mi verdadero potencial.